Qué pena del estado en que se encuentran!. Una maravilla. Aún recuerdo cuando venía con el burro y esa leche amarilla y potente... Buff, qué recuerdos...
No sé dónde y cómo la tomaste, en qué circunstancias, pero si la puedes tomar más próxima a su ambiente, en un baserri (dentro) en la cuadra, por ejemplo, creo que iba a quedar ya de enmarcar! Saludotes.